En una celebración del conocimiento y la salud, el Premio Nobel de Fisiología o Medicina 2025 fue concedido a Mary E. Brunkow (Institute for Systems Biology, Seattle, EE. UU.), Fred Ramsdell (Sonoma Biotherapeutics, San Francisco, EE. UU.) y Shimon Sakaguchi (Universidad de Osaka, Japón) por su descubrimiento de los mecanismos que permiten al sistema inmunológico mantenerse en equilibrio y evitar que ataque los propios tejidos del cuerpo.
🔬 Un hallazgo que protege la vida
El trabajo de los tres científicos explicó cómo las llamadas células T reguladoras actúan como un freno natural del sistema inmune, previniendo respuestas autoinmunes que pueden causar enfermedades como la artritis reumatoide, la diabetes tipo 1 o la esclerosis múltiple.
Gracias a esta comprensión, la ciencia puede hoy desarrollar nuevas terapias biológicas que no solo tratan los síntomas, sino que restauran la armonía del sistema inmunológico desde su origen.
🌍 Una colaboración internacional por la salud
Este reconocimiento también celebra la colaboración global: Estados Unidos y Japón, unidos por la búsqueda de bienestar humano. Mary Brunkow identificó el gen FOXP3, pieza clave en la regulación inmune; Fred Ramsdell confirmó su función esencial, y Shimon Sakaguchi demostró su papel central en mantener la tolerancia inmunológica.
Sus hallazgos no solo transformaron la inmunología moderna, sino que abrieron caminos hacia tratamientos más seguros y personalizados.
💡 Ciencia al servicio del equilibrio
El Comité Nobel destacó que este descubrimiento “revela la sabiduría del propio cuerpo para mantener la paz interior”. Más allá de la investigación, el avance simboliza la importancia de la ciencia que cuida, previene y construye esperanza.
En un mundo donde las enfermedades autoinmunes afectan a millones, el Nobel Medicina 2025 sistema inmune representa una lección de equilibrio, colaboración y empatía científica.